El ministro de Sanidad italiano, Roberto Speranza, decidió este viernes (9) relajar las medidas contra la propagación del nuevo coronavirus (Sars-CoV-2) en seis regiones italianas.
Con ello, a partir del próximo lunes (12), Calabria, Lombardía, Emilia-Romaña, Friuli Venecia Julia, Piedmont y Toscana avanza a la zona naranja.
Las regiones se unen a Abruzos, Basílicata, Lacio, Liguria, Las Marcas, Molise, Sicilia, Umbría, Véneto y las provincias de Bolzano y Trento.
Bajo este régimen, no existen restricciones de circulación dentro del propio municipio y es posible reabrir los comercios no esenciales, pero los bares y restaurantes permanecen cerrados.
Sigue vigente un toque de queda nacional entre las 22 y las 5 horas de la mañana siguiente.
Hace un mes, Cerdeña era la única región con el nivel de restricción más bajo, los blancos. Pero debido a la aceleración de la emergencia sanitaria, pasará de la banda naranja a la roja, al igual que Campania, Apulia y el Valle de Aosta.
"Los cierres y las zonas rojas están dando los primeros resultados, pero el contexto sigue siendo muy complicado y debemos ser muy cautelosos", explicó Speranza.
Según datos de Instituto Superior de Salud (ISS), las nuevas infecciones han caído un 30% en los últimos cinco días en comparación con el mismo período de la semana pasada. En la mayoría de los territorios, el índice de transmisión (Rt) pasó de 0,98 a 0,92. Generalmente, una tasa superior a 1 indica que el número de casos crecerá exponencialmente.
En total, a partir del lunes habrá 16 regiones en zona naranja y cuatro en roja. (ANSA)
