Los mercados navideños regresan con fuerza este fin de año y los eventos italianos están llenos de atracciones especiales. En el norte del país se encuentran los más famosos, que cuentan con artes, juegos, objetos artesanales, comidas especiales y dulces.
en el corazón de Bressanone, en la región Trentino-Alto Adigio, las luces del mercado navideño se encendieron el 24 de noviembre con un rico programa de fiestas y eventos. Todos los lunes y miércoles se realiza una manifestación en la plaza Domo, con demostraciones de manualidades y relatos de cuentos clásicos.

Declarado evento “verde”, el Bressanone Presenta muchas medidas sostenibles, como la reducción de residuos, el control del consumo de energía y la facilitación del transporte ferroviario hasta el evento. El mercado está abierto hasta el 6 de enero.
Em Vipiteno, también en Trentino-Alto Adigio, luces, guirnaldas, belenes y adornos navideños en general son los atractivos para los visitantes del evento que se prolonga hasta el día de los Reyes Magos. Además, los paseos en carruajes hacen del lugar un escenario perfecto para una fotografía clásica del invierno europeo.

Bajo el “Torre de los Doce“, una antigua torre medieval construida en 1486, se camina entre 34 casas decoradas y se patina en una pista de hielo especialmente construida. Las comidas más populares son las galletas decoradas y el vino con canela.
Todavía en la misma región, Trento se convierte en la “ciudad de la Navidad” con eventos entre las plazas Fiera y Cesare Battisti hasta el 8 de enero.
Es uno de los mercados más sostenibles de Italia gracias a su reducido impacto medioambiental y a las dos bicicletas especiales colocadas en las plazas para que los visitantes ayuden a generar energía para alimentar las luces utilizadas en la feria. Desde hace 28 años, en las 75 casas de madera del mercado se puede encontrar de todo, desde objetos artesanales hasta delicias culinarias.

Ya en Livignoen la región de Lombardía, el entorno del mercado es mágico y está lleno de fábulas. Las pequeñas casas de madera están decoradas con luces de colores y adornos tradicionales, mientras que los perfumes y el manto de nieve sobre los tejados aportan una atmósfera aún más sugerente. El lugar está abierto hasta el 24 de diciembre.

Hasta el 11 de diciembre, en Santa María la Mayor, en el corazón de Valle de Ossola, en la región de Piedmont, son 200 chalets navideños en un largo recorrido expositivo donde se presentan todas las excelencias artesanales regionales.
Entre lo más destacado se encuentran obras realizadas con troncos de abeto y comidas tradicionales decoradas, además de vinos, piadinas y castañas portuguesas asadas.

(Manejar)
