Grupo operado en centros de examen repartidos en varias ciudades del norte de Italia.
Cinco personas fueron arrestadas en Módena, en el norte de Italia, acusadas de fraude y falsificación de documentos para obtener un permiso de residencia.
Según la policía, el grupo facilitaba exámenes de conocimiento del idioma italiano.
25 personas fueron investigadas y más de 6 mil extranjeros beneficiados.
En los exámenes realizados entre julio y septiembre de 2018, todos los candidatos fueron promovidos. Los extranjeros recibieron los formularios ya diligenciados con las respuestas.
Dos meses más tarde, cuando la Universidad de Perugia reemplazó todos los formularios de examen, justo antes de la prueba, todos los candidatos reprobaron.
El grupo operaba en centros examinadores repartidos por varias ciudades del norte de Italia, incluidas las regiones de Lombardía, Véneto, Trentino Alto Adige y Emilia-Romaña.
Para obtener el “CELI” (Certificación de conocimiento de la lengua italiana), los candidatos pagaban entre 450 y 700 euros, alrededor de 2 y 3.100 reales, respectivamente.
El examen se volvió obligatorio
Desde el 05 de diciembre, cuando entró en vigor el Decreto Salvini, el conocimiento previo de la lengua italiana a través de una prueba de competencia es obligatorio para cualquiera que desee postularse para el naturalización Italiano.
La medida se aplica tanto a quienes viven en el país europeo como a quienes han iniciado su naturalización italiana en Brasil, porque su cónyuge es ciudadano italiano.
El candidato a la naturalización deberá alcanzar al menos el nivel B1, que equivale a intermedio, para que el proceso pueda completarse.
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