Avión de Torino se estrelló y murieron 31 personas, entre ellas parte de la selección italiana que iba al Mundial de 1950
Hace 70 años, el mundo se despidió de uno de los mejores equipos de fútbol de todos los tiempos. El Grande Torino, como se conocía a la escuadra vinícola de Turín, desapareció en un trágico accidente aéreo cuando regresaba de un amistoso contra el Benfica en Portugal. La tragedia de Superga nunca fue superada por los italianos. Y, como la cicatriz de una herida, intensificó aún más la relación entre una ciudad y un club.
Con la visibilidad del piloto reducida debido a la densa niebla, el avión, que había despegado de Lisboa, con escala en Barcelona, cuando se acercaba a Turín se estrelló contra un muro de la Basílica de Superga, en lo alto de una colina de la ciudad : 31 personas que se encontraban en el aparato perdieron la vida. Pero las consecuencias del accidente fueron mucho más profundas que eso. Destruyó familias, acabó con una selección nacional, dejó cicatrices en un club y cambió el fútbol italiano para siempre.
El Gran Turín
Destruida por la Segunda Guerra Mundial, Italia veía en el fútbol una gran fuente de frustración. Más que eso. Éste fue el gran motivo de alegría de miles de personas que se encontraban al borde de la devastación provocada por el hambre y la falta de perspectivas de futuro.
Es en este contexto que, liderado por Valentino Mazzolla, Torino cautivó al país. A diferencia del fútbol que se practica en Italia, los Bulls preferían el juego ofensivo y por eso atraían la atención del público. Una estrategia marcada por este estilo de juego fueron los llamados “15 minutos en Filadelfia (estadio)”, cuando el equipo atacó al rival durante 15 minutos de manera arrolladora. Con mucha velocidad, el equipo marcó un ritmo demencial que encantó a su afición.
Ese dominio se puede ver en los logros del Torino esta temporada. El club fue cinco veces campeón de Italia, cuatro veces seguidas (de 1945/46 a 1948/49), último título otorgado por la Federación Italiana en honor a los fallecidos en el accidente. En 1943, el club se convirtió en el primer equipo en ganar el campeonato y la copa en la misma temporada.
El equipo italiano aprovechó el éxito de la escuadra de Turín. En 1947, en un partido contra Hungría, diez de los 11 titulares de los azzurri eran del Torino. El equipo, que tenía su base en el club Grená, acabó debilitado en el Mundial de 1950 tras el accidente aéreo, cuando perdió a sus principales jugadores. En Italia muchos dicen que sólo el cielo podría detener a este equipo que ningún equipo italiano pudo detener.
El legado
El día del funeral, los jugadores fueron recibidos por casi un millón de personas que salieron a la calle para despedir a los héroes italianos. Más que simples jugadores, los atletas eran conocidos en la sociedad, eran dueños de negocios locales y estaban presentes en sus comunidades.
Desde entonces, el club nunca ha podido dejar atrás su pasado. El accidente aéreo dejó una profunda huella en los aficionados del Torino y en la cultura local. Las marcas deportivas, sin embargo, son bastante visibles. El club no volvió a ser campeón de Italia hasta 1971 y más tarde en 1993, y vio a su rival, la Juventus, crecer y dominar el fútbol en el país. Por respeto a la fecha, los dos equipos decidieron adelantar el clásico de la ciudad para este viernes.
La tragedia de Superga fue una metáfora de la época que se vivía en Italia en aquel momento. De la frustración por la guerra, el equipo de Torino dio alegría a un pueblo que sufre la destrucción y la desesperanza. Pero, como todo en la vida, fue víctima del tiempo. En este caso, de la forma más trágica posible.
en memoria de: Aldo Ballarin, Danilo Martelli, Dino Ballarin, Eusebio Castigliano, Ezio Loik, Franco Ossola, Giuseppe Grezar, Guglielmo Gabetto, Julius Schubert, Mario Rigamonti, Milo Bongiorni, Piero Operto, Romeo Menti, Rubens Fadini, Ruggero Grava, Virgilio Maroso, Valerio Bacigalupo, Valentino Mazzola.
Pedro Umberto/Rodrigo Cerqueira/Agencia o Globo