Un equipo de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, creó el Orbis, una plataforma que permite calcular tiempos y costos de viaje durante el Imperio romano.
Cómo funciona Orbis
Orbis, término que en latín significa “mundo”, es un tipo de Google Maps creado en la época de los antiguos romanos.
La plataforma permite simular movimientos a lo largo de las vías de comunicación que estaban presentes alrededor del año 200 d.C., uno de los períodos de máxima esplendor del imperio romano.
En gráficos y operación, el Orbis Parece Google Maps. Al abrir la plataforma, podrás ver a la izquierda de la pantalla un cuadro para ingresar la ciudad de salida, destino y vehículo, mientras que a la derecha está el mapa de los territorios.
Después de ingresar su ubicación de inicio y la que desea ir, la ruta se mostrará en el mapa. Todos los detalles, sin embargo, se encuentran de la misma manera que se encontrarían en la época romana, desde los nombres de las ciudades hasta los medios de transporte, desde el coste del viaje hasta las carreteras existentes.
El mapa muestra no sólo carreteras viables, sino también ríos y rutas marítimas navegables. La plataforma sugiere la ruta más corta, rápida y económica.
Para un cálculo más preciso, también puede ingresar el mes de salida para comprender con precisión, en función del período, cuánto tiempo se tardaría realmente en viajar entre los lugares introducidos.
De Roma a Milán con Orbis
Actualmente el viaje entre Milán y Roma puede durar una hora si vas en avión, tres horas y media en tren y unas seis horas en coche.
Usando la plataforma Orbis para simular un viaje de Roma a Milán, podemos calcular el tiempo y los costos necesarios hace 1800 años.
Según Orbis, el manera más rápida La forma de hacerlo es utilizando un relevo de caballos.
Los caballos, que recorrieron un recorrido de 623 km, podían recorrer unos 250 km por día y les permitieron llegar a Milán, o Mediolanum como se llamó en su momento, en apenas tres días.
La forma más barata de realizar este viaje era en burro, que tardaba unos 12 días en recorrer los 737 kilómetros que hay desde la capital hasta Milán. En cambio, un carro tirado por bueyes podía tardar hasta cincuenta días en llegar desde la capital. a la ciudad lombarda.
¿Tienes curiosidad? Entonces toma tu ruta: orbis.stanford.edu