Más que una estrella de Hollywood y ganador de un Oscar, Nicolas Cage es el heredero de una rica tradición artística con profundas raíces en Italia.
nascido Nicolas kim coppola, el actor lleva en su nombre de pila la herencia de una de las familias más influyentes del cine estadounidense, los Coppola, cuyos orígenes se remontan a los pequeños pueblos de Bernaldaen la región de Basilicata, y con NápolesEn campania.
Cage es hijo del profesor universitario August Coppola y de la coreógrafa Joy Vogelsang. Su lado paterno es enteramente italiano, descendiente directo de inmigrantes que cruzaron el Atlántico a principios del siglo XX.

Tus bisabuelos, Agostino Coppola (nacido en Bernalda) y María Zasa, nacieron respectivamente en Italia y Túnez, donde había una importante comunidad italo-tunecina. Se casaron en Nueva York en 1908, según los registros oficiales, y se instaló en Brooklyn. En cuanto a tu abuela paterna, Italia de los Peninos, era hija del compositor napolitano Francesco Pennino, reforzando el vínculo familiar con el sur de Italia.

Un legado artístico que se extiende a lo largo de generaciones
En el árbol genealógico de la familia Coppola, el talento parece ser hereditario. El abuelo de Nicolás, Carmín Coppola, fue un compositor premiado, mientras que su abuela, Italia, trabajó como actriz y letrista. Su padre, August Coppola, dedicó su vida a la literatura y a la docencia universitaria. Y por supuesto, tu tío no es otro que Francis Ford Coppola, director de clásicos como El poderoso jefe, y su prima es la cineasta Sofia Coppola.

A pesar de la influencia familiar, Nicolás decidió seguir su propio camino artístico. Para evitar acusaciones de favoritismo debido a su apellido, adoptó el nombre artístico “Cage”, inspirado en el superhéroe luke Cage y en el compositor John Cage. “Amo a mi familia y todos sus logros, pero como actor joven, mi nombre me presionaba. Adoptar un nuevo nombre me dio la libertad de convertirme en quien soñaba”, dijo en una entrevista con la revista. Las conversaciones.

Orgullo de los orígenes
Cage nunca negó sus orígenes. En entrevistas, muestra orgullo por su herencia italiana y ha compartido recuerdos memorables vinculados a Italia. En una conversación con el Feria de las vanidades, recordó cuando, siendo niño, fue cuidado por monjas mientras visitaba el país con su familia. “Me dieron una bebida que sabía a regaliz, creo que era Sambuca, y un guiso hecho con carne de zorro”, dijo, con una mezcla de nostalgia y asombro.
Su vínculo con Bernalda, en particular, se mantiene hasta el día de hoy. Fue allí donde su tío Francisco restauró el palacio margarita, transformándolo en un lujoso hotel boutique que celebra las raíces de la familia Coppola. El edificio del siglo XIX simboliza no sólo el rescate del patrimonio italiano, sino también la permanencia de un legado cultural que trasciende fronteras.

Patrimonio e identidad
La conexión de Nicolas Cage con Italia es más que una curiosidad biográfica: es un elemento constitutivo de su identidad. Nació en Estados Unidos, creció entre Long Beach y San Francisco, enfrentó la adversidad en la infancia y encontró en el arte una forma de expresión y supervivencia. Pero es en su ascendencia donde encuentra parte de su dirección.

Esta herencia italiana, procedente exclusivamente de su línea paterna, no sólo moldea su pasado, sino que resuena en sus elecciones artísticas y en la sensibilidad que imprime a sus personajes.
Entre superproducciones y películas independientes, Cage preserva algo que va más allá de la pantalla: la continuidad de un legado italoamericano que sigue vivo en cada generación de la familia Coppola.
Este artículo es parte de la serie “Hecho en Italia: Estrellas mundiales”, en el italianismo, celebrando personalidades internacionales con raíces italianas.
