Los días 18 y 19 de noviembre, Río de Janeiro acogerá la cumbre del G20, que reunirá a 55 líderes de países y jefes de organizaciones internacionales. Entre las reuniones bilaterales previstas, uno de los aspectos más destacados será el encuentro entre el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el Primer Ministro de Italia, Giorgia Meloni.
En el centro del orden del día se encuentran las cuestiones relativas a la concesión de Enel, la empresa estatal italiana responsable de la distribución de electricidad en São Paulo.
Recientemente, Meloni pidió disculpas a Lula por las fallas operativas que resultaron en apagones en la capital de São Paulo.
Esta petición se hizo durante la reunión del G7 de junio, después de que el presidente brasileño exigiera personalmente una solución al propio Meloni y al presidente de Enel, Flavio Cattaneo.
Además de Enel, la reunión de Lula con Meloni abordará el acuerdo Mercosur-Unión Europea, con Italia interesada en consolidarse como puerta de entrada de las exportaciones brasileñas al continente europeo.
Otro tema relevante es la negociación para la adquisición de 24 aviones de combate ligeros M-346 por parte de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), además de seis unidades adicionales para la Armada.
Los cazas, que deben estar equipados con sistemas electrónicos y armas fabricadas en Brasil, aparecen como sustitutos modernos y asequibles del antiguo AMX, también fruto de la cooperación entre Brasil e Italia. Esta iniciativa complementaría los cazas suecos Gripen que ya opera la FAB.