O volcán etnaEl volcán más grande de Europa entró en erupción la noche del domingo 1 de junio de 2025, arrojando lava y ceniza por la región de Sicilia, en el sur de Italia. La actividad sísmica sorprendió a los turistas que se encontraban cerca del lugar.
Según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), la erupción se produjo a una altitud aproximada de 2.800 metros. A pesar de su intensidad, la lava permanece alejada de las zonas urbanas. Hasta el momento, no se han reportado heridos.
La primera notificación de la INGV Ocurrió a las 2:39 a. m. hora local, lo que indica un cambio repentino en los parámetros volcánicos. La erupción generó columnas de ceniza visibles desde ciudades cercanas, como Catania, ubicada a 35 kilómetros del volcán.
El Etna, situado entre Catania y Messina, es uno de los atractivos naturales más visitados de Italia. Numerosos turistas se encontraban en la montaña y capturaron imágenes de la erupción en la madrugada del lunes.
Consecuencias inmediatas
el aeropuerto de catania Sigue operando bajo vigilancia. Algunas carreteras han sido bloqueadas y las escuelas han suspendido las clases como medida de precaución. Las autoridades han emitido advertencias para evitar las zonas cercanas a la cumbre.
Renato Schifani, presidente de la región de Sicilia, afirmó que no existía ningún riesgo inmediato para la población, según un informe de la Agencia de Protección Civil de Italia. El director de la Agencia de Protección Civil local, Salvo Cocina, instó a la precaución y pidió a los visitantes que respetaran las normas de seguridad.
Historial de actividad del Etna
El Etna es uno de los volcanes más activos del mundo, con más de 200 erupciones registradas a lo largo de 2.500 años. La más devastadora ocurrió en 1669, cuando la lava alcanzó las paredes de Catania.
Con unos 3.300 metros de altitud, el Etna domina el paisaje de la costa este de Sicilia. Su constante actividad lo convierte en un importante objeto de estudio geológico y un símbolo de la fortaleza natural de la región.
Turismo e impactos económicos
A pesar de los riesgos, el volcán es uno de los motores del turismo siciliano. Miles de personas lo visitan cada año para practicar senderismo y explorar los cráteres. La producción agrícola también se beneficia de la fertilidad de los suelos volcánicos, especialmente en la producción de vino y aceite de oliva.
Debido a la nueva erupción, las actividades turísticas se han suspendido temporalmente. Se reanudarán tras una evaluación de las condiciones de seguridad.
Monitoreo continuo
El INGV continúa monitoreando las 24 horas con sensores sísmicos, drones e imágenes satelitales. La prioridad es garantizar la seguridad de la población y los visitantes ante la posibilidad de nuevas explosiones o flujos de lava.