El gobernador de la región italiana de Cerdeña, Christian Solinas, afirmó este lunes (26) que comunidades enteras están "de rodillas" a causa de los incendios forestales que azotaron la isla el fin de semana pasado.
Las llamas se extendieron por una superficie de 20 hectáreas en el oeste de la región y provocaron la evacuación de alrededor de un millar de personas, además de daños medioambientales que aún están siendo contabilizados por las autoridades locales.
“Fue una pérdida incalculable que puso de rodillas a comunidades enteras y a su tejido productivo y social. Bosques enteros quedaron completamente destruidos, casas y negocios quedaron devastados y un gran número de ganado murió en el incendio”, afirmó.
Más de 20 vehículos aéreos, incluidos cuatro aviones de extinción de incendios enviados por Francia y Grecia, están ayudando en las operaciones posteriores. Según Coldiretti, la principal asociación de agricultores de Italia, se necesitarán al menos 15 años para reconstruir los bosques devastados.
En Cuglieri, un olivo de más de mil años quedó completamente quemado por las llamas. La planta tenía 10 metros de circunferencia y 16 metros de altura y figuraba en la lista de “árboles monumentales” elaborada por el Ministerio de Agricultura.
Las autoridades siguen en alerta ante posibles nuevos incendios en los próximos días. (ANSA)