El Primer Ministro de Italia, Giorgia Meloni, anunció este martes (4) que su gobierno logró reducir las llegadas de inmigrantes ilegales en un 60% en 2024 en comparación con el mismo período del año pasado.
"El compromiso de todo el gobierno nos ha permitido reducir las llegadas ilegales en un 60% en comparación con el mismo período del año pasado", dijo en una sesión informativa ante el Consejo de Ministros.
Según Meloni, este resultado fue “posible principalmente gracias a las relaciones de colaboración con los países del norte de África, liderados por Túnez y Libia”.
El Primer Ministro italiano explicó que “un avance muy reciente consiste en los trabajos destinados a decretar una zona SAR tunecina” y “mañana el grupo de trabajo mixto italo-tunecino se reunirá en Roma ayudar a las autoridades marítimas a elaborar un plan pertinente”.
"La perspectiva común es formalizar la existencia de una zona marítima que prevea la intervención de barcos tunecinos para llevar a cabo labores de salvamento y devolver a los inmigrantes al puerto más seguro y cercano, es decir, en Túnez", añadió.
Meloni también destacó que, tras la formación del gobierno, era necesario definir rápidamente flujos regulares de entrada a Italia. Posteriormente, se emitió un decreto implementando la programación para el trienio 2023-2025 y se estableció una “mesa técnica para monitorear su aplicación”.
Según ella, “ahora surgen datos alarmantes de este seguimiento”. "En algunas regiones, especialmente en Campania, hemos registrado una serie de solicitudes de permisos de trabajo para ciudadanos de fuera de la UE, que son completamente desproporcionadas con respecto al número de posibles empleadores, ya sean particulares o empresas".
Además, destacó que acudió al Fiscal Nacional Antimafia y Antiterrorismo, Giovanni Melillo, para presentar una denuncia sobre los flujos de trabajadores extranjeros que ingresaron a Italia en los últimos años, utilizando los llamados “Decretos de Flujo”.
Para ella, “los flujos regulares de inmigrantes por motivos laborales se utilizan como un canal más para la inmigración irregular”.
Las declaraciones se producen un día después de que Meloni viajara a Albania para visitar las zonas donde se crearán dos centros de identificación y expulsión a los que Italia enviará a los inmigrantes que lleguen a su territorio.
La iniciativa se enmarca en un acuerdo firmado con su homólogo albanés, Edi Rama, a pocos días de las elecciones europeas, y prevé la construcción de dos centros de identificación y acogida de inmigrantes rescatados en el Mediterráneo, con una capacidad máxima de 3 personas al mes , o 36 mil por año.
El objetivo es que en estos centros -financiados por Italia- se tramiten las solicitudes de asilo y que aquellos a quienes se les niega este estatus también sean repatriados desde allí, lo que reduciría el número de inmigrantes en territorio italiano. (Ansa Brasil)